25 años son muchos. Y más cuando hablamos de tecnología. Ese es el tiempo que lleva Akamai en el mercado. Nació con una solución de entrega de contenido y ahora controla entre el 30 y el 35 por ciento de todo el contenido que se distribuye por Internet. Eso le permite, entre otras cosas, ver qué está pasando, explica Francisco Arnau, director general de Akamai para España y Portugal, añadiendo que “de la misma manera que entregamos el contenido, protegemos a nuestros clientes: de una forma distribuida”.
Tras lanzar Akamai Connected Cloud el año pasado, la compañía sigue adelante con su estrategia de cloud computing abriendo “un montón de centros de datos”, incluido uno en Madrid que hace el vigésimo quinto del mundo y el séptimo de Europa y que demuestra, entre otras cosas, “el potencial que la compañía ve en el mercado español”.
Este nuevo centro de datos no solo permite a Akamai “estar mucho más cerca de nuestros clientes”, sino impulsar Gecko (Generalized Edge Compute), la nueva iniciativa de Akamai que combina la potencia informática de su plataforma en la nube con la proximidad y eficiencia del borde para acercar las cargas de trabajo a los usuarios que cualquier otro proveedor de la nube.
“Nosotros venimos a hacer algo completamente diferente, algo que no hace nadie: llevar el modelo cloud a un modelo distribuido donde las cargas de trabajo se ejecuten de forma cercana al usuario final”, explicaba Federico Dios, evangelista y Cloud Security & Performance de Akamai. Explicaba el directivo en una rueda de prensa que el modelo cloud actual se sostiene fundamentalmente en centros de datos muy grandes, con muchísima capacidad de procesamiento, donde hay donde se ejecutan todas estas cargas de trabajo. “Dentro de nuestra plataforma nosotros hemos integrado una serie de centros de datos que tienen muchísima capacidad de procesamiento”, esa combinación es Gecko, que permite ejecutar cargas de trabajo en forma de máquinas virtuales.
Es decir, Gecko trasladará la computación tradicional más pesada, normalmente confinada a centros de datos centralizados, al edge de la red de Akamai. Esto llevará la computación integral a cientos de ubicaciones previamente difíciles de alcanzar, permitiendo a los clientes mover cargas de trabajo más cerca de sus usuarios.
Akamai pretende integrar computación con soporte para máquinas virtuales en aproximadamente 100 ciudades para fin de año. A esta primera fase le seguirá una segunda en que se planea agregar soporte para contenedores para, posteriormente, desarrollar una orquestación automatizada de cargas de trabajo con el fin de facilitar a los desarrolladores la creación de aplicaciones en cientos de ubicaciones distribuidas.
Inferencia de IA, aprendizaje profundo para motores de recomendación, análisis de datos, juegos multijugador, aceleración de transacciones bancarias, personalización para comercio electrónico son algunos de los casos de uso donde extraer el máximo valor de Gecko mencionados durante el encuentro entre Akamai y la prensa especializada.