CrowdStrike ha vuelto a crecer con fuerza en el segundo trimestre fiscal de 2026, apoyada en el tirón de la inteligencia artificial y en la consolidación de sus clientes alrededor de la plataforma Falcon. La presentación de resultados ante inversores, información a la que ha tenido acceso Ciberseguridad TIC, dejó claro el mensaje de su consejero delegado, George Kurtz: “El tema clave del trimestre fue la re-aceleración. Hemos vuelto al crecimiento interanual de ARR neto nuevo un trimestre antes de lo previsto”.
La compañía cerró el trimestre con un ARR total de 4.660 millones de dólares, un 20% más que el año pasado, ingresos de 1.170 millones (+21%) y un flujo de caja libre de 284 millones, también récord. Para Kurtz, los números demuestran que “la demanda que la IA genera hacia la plataforma Falcon y una ejecución sobresaliente en todo el negocio” están detrás de este impulso.
La seguridad en la era de la IA
El directivo insistió en que la inteligencia artificial está redefiniendo tanto las necesidades de protección de las empresas como las capacidades de los atacantes. “El impacto de la IA es palpable. Ejecutivos y Consejos me preguntan dónde aparece la shadow AI en sus negocios, cómo controlar qué datos entran en los sistemas de IA o cómo asegurar a los agentes de IA”, explicó. Y advirtió: “El mundo está a punto de embarcarse en la mayor carrera armamentística de la historia: la carrera por la superioridad en IA”.
Frente a este reto, Kurtz defendió que “la seguridad de la IA no es ni será un problema de red. Debe estar en los dispositivos, cargas de trabajo, datos e identidades, en cualquier lugar, siempre activa”.
Innovación y adquisiciones
La compañía anunció la compra de Onum, una plataforma de canalización de datos que, en palabras del CEO, “permitirá empezar el análisis antes incluso de que los datos entren en Falcon, con una velocidad 5 veces mayor que la competencia y una reducción del 50% en costes de almacenamiento”.
También destacó la evolución de Charlotte, su analista SOC basado en IA, que creció un 85% en un trimestre. “No es un chatbot, sino una capa de orquestación integrada en todos nuestros módulos, capaz de reducir investigaciones de cuatro días a una hora y actuar como un analista de nivel 1 autónomo”, señaló Kurtz.
Identidad, nube y consolidación
La protección de la identidad fue otro de los mensajes centrales. “Identificamos muy pronto, en 2020, que la identidad era un elemento clave en las brechas”, recordó Kurtz, que subrayó la buena acogida de su nueva oferta de PAM.
En la nube, la compañía superó los 700 millones de ARR (+35%), gracias a la protección en tiempo real de entornos críticos. Y el modelo Falcon Flex sigue funcionando como motor de crecimiento: más de 1.000 clientes lo utilizan y la tasa de renovación de módulos supera el 95%.
Mensajes en el Q&A
En la sesión de preguntas, Kurtz defendió que los clientes “buscan alternativas a las soluciones heredadas” en identidad, y que con Onum la compañía ofrece “menos datos que mover y resultados más rápidos”. También subrayó el papel clave del EDR: “El SOC moderno se construye sobre EDR y SIEM, y seguimos siendo líderes e innovadores en este terreno”.
Preguntado por el impacto de la IA, fue tajante: “No habrá más IA sin seguridad. Un agente de IA es un superhumano, y estamos en la posición perfecta para protegerlos”.
La empresa prevé que el ARR neto nuevo crezca al menos un 40% en la segunda mitad del año y confía en superar la barrera de los 5.000 millones. En palabras de Kurtz, “la demanda impulsada por la IA y la consolidación impulsada por los clientes, junto con nuestro modelo Flex, sostienen mi convicción de crecimiento continuado”.