Con casi 40 años de historia, Cisco facturó 57.000 millones de dólares en su año fiscal 2023, logrando un beneficio neto de 12.600 millones. El negocio de redes no solo sigue siendo la parte que más suma en las cuentas de la compañía, 29.000 millones, frente al de Seguridad, 987 millones, sino el que más crece en términos anales, un 22% frente a un 4%. Convertirse en un jugador destacado dentro del mercado de ciberseguridad, tanto para los clientes como para los partners, es un objetivo para la compañía, que lo lleva demostrando desde hace años, con compras tan estratégicas como las de Open DNS o Portcullis en 2015; CloudLock en 2016; Viptela u Observable en 2017; Duo Security en 2019… Kenna Security, Valtix, Oort y Splunk, por mencionar la última y algunas de las más destacadas.
La compañía, además, fichó hace algo más de un año a Emma Carpenter. O quizá habría que decir que recuperó a la directiva, una exCisco, que había estados trabajando en Palo Alto durante dos años y medio. Durante un encuentro mantenido en Madrid con la prensa especializada, la Vicepresidenta Mundial de Asesoría Especializada en Seguridad en Cisco, reconoció que apostó por el cambio porque el mensaje de la compañía fue claro: la seguridad es absolutamente prioritario para Cisco.
“Desde el punto de vista de la seguridad hemos duplicado nuestra inversión en los últimos doce meses y continuaremos duplicando esa inversión en todo el espacio de seguridad”, aseguró Emma Carpenter dejando claro que el punto de partida es la red: ¿cómo se garantiza el acceso de usuarios confiables a una red? ¿cómo se garantiza un nivel constante de seguridad en entornos de múltiples nubes? Mencionaba también la directiva la propuesta de XDR anunciada durante la RSA de San Francisco, y su capacidad de recibir telemetría de múltiples fuentes competitivas para, “con la increíble capacidad que tenemos como actor de red y usar todos esos datos juntos para detectar y responder a las amenazas en un centro de operaciones de seguridad”.
También recientemente, el pasado mes de junio, presentaba la compañía su solución Cisco Secure Access, que ayuda a los usuarios finales a acceder de forma segura a todo lo que necesitan para hacer su mejor trabajo, desde cualquier lugar. Cisco Secure Access mitiga el riesgo de seguridad aplicando principios de confianza cero y aplicando políticas de seguridad granulares. Las capacidades de la solución incluyen acceso a la red de confianza cero (ZTNA), puerta de enlace web segura (SWG), agente de seguridad de acceso a la nube (CASB), firewall como servicio (FWaaS), seguridad DNS, aislamiento remoto del navegador (RBI) y más… “Es increíble la inversión que estamos haciendo en este espacio”, decía Carpenter, añadiendo: “debemos seguir invirtiendo a medida que avancemos”.
Y no hay que olvidar Cisco Multicloud Defense, que extiende el concepto tradicional de firewall a un mundo multi-cloud consolidando las funciones de red y seguridad cloud en un mismo lugar.
Pasaba Emma Carpenter a hablar de tendencias del mercado. Y una de ellas es la complejidad, provocada no solo por tener que maniobrar entre múltiples nubes, sino por gestionar cientos de soluciones de diferentes proveedores. La solución a este problema, aseguraba Ángel Ortiz, director de Ciberseguridad en Cisco España, y también presente en la rueda de prensa, es Cisco Security Cloud, que definía como “una plataforma integrada y entregadas desde la nube que ofrece una seguridad extremo de forma predeterminada”. Una plataforma que, anunciada hace unos meses, “ya es una realidad” y que ofrece beneficios a los usuarios, que obtienen una experiencia simple y transparente; los equipos de TI, que tienen a su alcance la posibilidad de ofrecer políticas unificadas; el SOC que consigue una visibilidad única, y los equipos de DevSecOps.
IA generativa, integraciones e inteligencia
Otro elemento clave en la evolución de Cisco Security Cloud es el uso de Inteligencia Artificial generativa, con un asistente que permite a las organizaciones describir políticas de seguridad granulares y evaluar la mejor manera de implantarlas en su infraestructura y otro para contextualizar los ataques y su impacto.
La plataforma también cuenta con más de 400 integraciones de terceros a través de sus APIs abiertas. Y con el soporte de Talos (la división de ciber-inteligencia de Cisco que procesa más de 400.000 millones de eventos de seguridad al día) a través el nuevo servicio Talos Intelligence On-Demand, proporcionando una investigación personalizada.
“Gracias a todas estas soluciones, las organizaciones pueden comenzar a implementar su propio entorno integral de seguridad multi-nube. La experiencia de Cisco integrando redes y seguridad y nuestro modelo de negocio neutral en la nube nos permite ofrecer esta plataforma única en el mercado para mejorar la resiliencia de los clientes frente a los cambios en su entorno y las crecientes amenazas” concluye Ortiz.