En un entorno donde los ataques se ejecutan en minutos y la visibilidad sigue siendo un reto, Tekpyme acompaña a las empresas en la adopción de servicios MDR (Managed Detection and Response) para reforzar su capacidad de detección y respuesta. Su director comercial, Alberto Blanco, subraya que los grandes desafíos actuales se concentran en tres frentes: “la visibilidad, la velocidad y el talento”. Muchas organizaciones —especialmente las que operan en entornos híbridos o distribuidos— carecen de una visión completa de su infraestructura y sufren para reaccionar a tiempo ante las amenazas.
En este escenario, el MDR se convierte en una pieza clave. Blanco explica que el enfoque de Tekpyme se apoya en “la integración tecnológica y la proximidad operativa”, porque un servicio de este tipo “no puede ser un centro remoto desconectado del cliente”. La compañía trabaja de forma coordinada con los equipos internos, comparte decisiones de cibercontrol y adapta los procedimientos al contexto operativo del cliente para reducir los tiempos de respuesta y ofrecer un servicio realmente cercano.
Dar el salto al MDR genera dudas, especialmente entre las medianas empresas. Según Blanco, los temores más frecuentes giran en torno al coste, la integración y la pérdida de control. “El MDR no es exclusivo de grandes compañías. Se puede escalar según las necesidades y aprovechar las inversiones previas en seguridad”, asegura. Además, destaca la importancia de la transparencia: “El cliente quiere saber que no pierde el control sobre su seguridad; por eso compartimos dashboards, informes y decisiones en tiempo real”.
Para el directivo, la colaboración entre fabricantes y partners es “absolutamente esencial”. La alianza entre Sophos y Tekpyme, dice, demuestra cómo combinar tecnología avanzada y conocimiento cercano para ofrecer una defensa 24/7 realmente proactiva. “El futuro de la ciberseguridad se construye sobre relaciones a largo plazo, donde fabricantes y partners trabajen sincronizados”, concluye.