Hace unos meses se anunciaba el cierre de la compra de VMware por parte de Broadcom. La adquisición, planteada un año y medio antes, era la cuadragésimo primera de la compañía, según datos de Crunchbase, y seguía a las de Brocade en 2016; Argon, NortonLifeLock (Symantec) y Bay Dynamics en 2019; y AppNeta en diciembre de 2021.
Como ya explicaba hace unos años en un artículo publicado en IT Digital Security, la empresa que luego se convertiría en Broadcom inició su andadura en 1961 como como una división de productos de semiconductores de Hewlett-Packard. Durante años, la compañía fue creciendo y adquiriendo otras empresas del sector, hasta convertirse en uno de los líderes mundiales en semiconductores. En 2015, Broadcom se fusionó con Avago, otra empresa de semiconductores, para crear una compañía aún más grande y diversificada. La nueva Broadcom se convirtió en un gigante del sector tecnológico, con un peso importante en los mercados de móviles, centros de datos e Internet de las Cosas. Sin embargo, la compañía pronto se dio cuenta de que, para seguir creciendo, necesitaba algo más que hardware, lo que le llevó a comprar CA Technology o el negocio de consumo de Symantec.
La práctica habitual de la compañía es detectar empresas que tengan una fuerte cuota de mercado, pero perspectivas de crecimiento reducidas. Una vez cerrado el acuerdo de compra, consolida sus operaciones para reducir costes e intenta retener el talento de ingeniería. En el caso de Brocade, se vendió Ruckus Wireless y el negocio de ICX Swch a Arris; el de conmutación, enrutamiento y análisis de centros de datos a Extreme Networks; su plataforma de software Vyatta a AT&T; su negocio de controladores de entrega de aplicaciones virtuales a Pulse Secure y su negocio principal de paquetes virtuales a Mavenir.
En el caso de CA Technologies, se vendía Veracode a Thoma Bravo cuando apenas se había secado la tinta del acuerdo. El mismo poco tiempo tardó Broadcom en vender el negocio de servicios de Symantec a Accenture, un negocio que incluía seis centros de seguridad de operaciones y 300 empleados y que convertiría a la integradora en un gran proveedor de servicios de seguridad gestionada.
El pasado mes de junio, mientras se esperaba el cierre de la compra de VMware, Broadcom compraba ConnectALL con el objetivo de integrarla con su plataforma ValueOps y aumentar su oferta de gestión de flujo de valor y transformación digital.
VMware
Pero centrémonos en VMware. Justo una semana antes de que la fecha fijada para el vencimiento del acuerdo, el pasado 23 de noviembre, Broadcom cerraba la compra de VMware tras recibir el visto bueno por parte de las autoridades chinas. La compra, que pone sobre la mesa un total de 69.000 millones de dólares y es la más importante de Broadcom, es el último esfuerzo del director ejecutivo Hock Tan para impulsar el negocio de software de la compañía.
El enfoque de Broadcom en el futuro es ayudar a los clientes empresariales crear y modernizar sus entornos de nube privada e híbrida. Básicamente, Broadcom invertirá en VMware Cloud Foundation, que encaja en la visión de Broadcom de ayudar a los clientes a convertir la infraestructura de TI empresarial típicamente heterogénea en un entorno virtualizado y en contenedores, permitiendo nubes privadas e híbridas. El objetivo de la plataforma es liberar recursos de TI de tareas de integración y gestión de infraestructura. Esto les permitirá ofrecer servicios de TI que ayuden a alcanzar los objetivos empresariales minimizando los riesgos de seguridad, logrando un mejor tiempo de comercialización y generando ingresos adicionales a partir de nuevos servicios empresariales.
Teniendo esto claro, y como ya ocurriera con las anteriores adquisiciones realizadas por Broadcom, los cambios tras el cierre de la compra no hicieron esperar. El 28 de noviembre el presidente de VMware, Sumit Dhawan, dejaba la compañía para convertirse en el CEO de Proofpopint. El 1 de diciembre ya se anunciaban planes para despedir a más de dos mil empleados de VMware al tiempo que se evalúan alternativas estratégicas para las unidades de End-User Computing y Carbon Black de VMware.
Por cierto. En el último año fiscal los ingresos de VMware, incluyendo los generados por End-User Computing y Carbon Black, fueron de 13.400 millones de dólares, un 4 por ciento más que el año anterior. Tras el cierre de la compra Hock Tan, CEO de Broadcom, apostaba a que VMware, sin incluir a Carbon Black y End-User Computing Group, generará 12.000 millones de dólares en ingresos en los próximos once meses, y un crecimiento de dos dígitos cada año durante los próximos tres años.
Una de las principales prioridades del CEO de Broadcom para VMware es convertir el 60 por ciento de sus licencias perpetuas en ingresos por suscripción, una hazaña que espera haber realizado antes de fin de año y de la que ya habló el directivo por primera cuando se anunció la compra de la empresa en mayo de 2022.
Impacto en el canal
A partir del 5 de febrero de 2024, Broadcom realizará la transición de los programas de socios de VMware al programa Broadcom Advantage Partner Program. Lo que significa que en febrero quedarán rescindidos los acuerdos de VMware con sus revendedores y proveedores de servicios, quedará eliminado el programa de canal y los incentivos de ventas, y se obligará a los socios a volver a postularse para sus roles.
En un comunicado al que ha tenido acceso CRN asegura Broadcom que los revendedores y proveedores de servicios podrán lograr mayores oportunidades de rentabilidad gracias a un modelo simplificado que se centra en menos «ofertas empaquetadas», lo que proporciona a los socios de canal descuentos iniciales predecibles y más oportunidades de ingresos por servicios prestados.
Broadcom, el software y el impacto de la IA
En su esfuerzo por diversificar y depender menos de su negocio de semiconductores, ya hemos comentado que Broadcom ha expandido estratégicamente su negocio de software en los últimos años. En este terreno entran VMware (69.000 millones de dólares el 22 de noviembre de 2023), Symantec (10.700 millones de dólares en 2019) y CA Technologies (18.900 millones de dólares en 2018).
Broadcom espera que los ingresos totales por software (incluidos VMware, Symantec for Enterprise, Brocade y CA) alcancen los 20.000 millones de dólares para finales de este año. Broadcom prevé ingresos totales de 50.000 millones de dólares. El año pasado, sin el software VMware, Broadcom obtuvo 7.600 millones de dólares.
Los últimos datos de la compañía anticipan que el negocio de software de infraestructura contribuirá con el 40 % de los ingresos del grupo en el año fiscal 24, lo que refleja un aumento notable en comparación con el 22,8 % que representó en los ingresos totales en el año fiscal 2019. Este cambio estratégico en la combinación de ingresos muestra el compromiso de Broadcom de ampliar su presencia y sus flujos de ingresos en el sector del software.
Lo que llama la atención de los analistas es que, como ya hemos comentado, en lugar de adquirir activos de alto crecimiento, Broadcom parece centrarse en adquirir empresas de software de bajo crecimiento. Antes de adquirirla, Symantec se enfrentaba a un crecimiento estancado a medida que las cargas de trabajo pasaban a la nube y Symantec perdía la oportunidad de adentrarse en el mercado de seguridad en la nube.
Si bien los mainframes fueron el estándar para cargas de trabajo de misión crítica, en la última década perdieron popularidad, lo que llevó a que el negocio de CA Technologies, un actor importante en el mercado de soluciones de software mainframe, fuera disminuyendo.
En el lado del hardware, Broadcom ofrece semiconductores de enrutamiento y conmutación Ethernet, un negocio exitoso debido a la adopción generalizada de Ethernet en los centros de datos. La IA, cada vez más importante, está dejando atrás el ethernet debido a sus dificultades para satisfacer las demandas informáticas del aprendizaje automático, lo que lleva a pensar que Broadcom necesitará realizar inversiones sustanciales para competir eficazmente en este mercado.