La Comisión Europea ha presentado la Quantum Europe Strategy, una hoja de ruta para convertir a Europa en líder mundial en tecnologías cuánticas antes de 2030. Esta ambiciosa iniciativa, recogida en el documento oficial Quantum Europe Strategy: Quantum Europe in a Changing World, apuesta por transformar el histórico liderazgo científico europeo en capacidades industriales sólidas, con fuerte enfoque en soberanía tecnológica y autonomía estratégica.
La estrategia parte de una constatación: aunque Europa cuenta con el mayor número de publicaciones científicas en cuántica y concentra el 33 % de las startups del sector a nivel global, su peso en inversiones privadas es muy limitado (apenas un 5 %), muy por detrás de Estados Unidos o China. Por eso, la Comisión aboga por actuar “con urgencia, claridad y unidad” para no quedarse atrás en una carrera que ya ha entrado en fase de industrialización.
Cinco pilares para un liderazgo cuántico
La hoja de ruta gira en torno a cinco grandes áreas estratégicas:
- Investigación e innovación: Se lanza la Quantum Europe Research and Innovation Initiative, que buscará alinear los esfuerzos de la UE y los Estados miembros para avanzar desde la investigación básica hasta la aplicación industrial. Esta iniciativa incluirá inversiones en infraestructuras, talento y transferencia tecnológica.
- Infraestructuras cuánticas: Se financiarán seis líneas piloto de chips cuánticos (con hasta 50 millones de euros cada una), una instalación de diseño de circuitos, ordenadores cuánticos híbridos y redes seguras de comunicación. Además, se desplegará una red terrestre y satelital que permitirá establecer una primera red de comunicación cuántica paneuropea en 2030.
- Ecosistema industrial: Para garantizar una transición eficaz «del laboratorio al mercado», se crearán bancos de pruebas, se reforzarán los Clústeres de Competencia Cuántica, se incentivará la compra pública de soluciones cuánticas y se impulsará el acceso a financiación a través de fondos como el EIC Fund o InvestEU.
- Aplicaciones en seguridad, defensa y espacio: El potencial dual de la cuántica —civil y militar— se integra en la estrategia. Destacan proyectos como sensores de navegación sin GPS, comunicaciones cifradas por satélite, y un acuerdo con la Agencia Espacial Europea para desarrollar una hoja de ruta tecnológica común.
- Capacidades y formación: En 2026 se pondrá en marcha la European Quantum Skills Academy, que ofrecerá programas formativos, becas, estancias industriales y módulos de concienciación para fomentar vocaciones. También se promoverá la diversidad de género y la movilidad del talento cuántico en Europa.
Una ley cuántica en el horizonte
Para garantizar la coherencia legal y financiera, la Comisión presentará en 2026 una propuesta de Ley Cuántica Europea (Quantum Act) que consolidará el marco regulatorio, facilitará la inversión en producción industrial y reforzará la cooperación multinivel.
La gobernanza se apoyará en un comité asesor de alto nivel —que incluirá Premios Nobel europeos— y en una cooperación estrecha con los Estados miembros, el ecosistema académico e industrial y organismos como la EuroHPC Joint Undertaking, cuya misión se ampliará para incluir todas las tecnologías cuánticas (págs. 5 y 21).
El documento subraya que el mercado cuántico mundial podría alcanzar los 155.000 millones de euros en 2040, y que su impacto abarcará desde la detección precoz de enfermedades hasta la criptografía postcuántica, la eficiencia energética o la navegación autónoma. Pero para lograrlo, Europa debe superar la fragmentación nacional, atraer inversión privada, y asegurar un entorno competitivo para sus startups (págs. 2, 11 y 22).
En definitiva, la Quantum Europe Strategy constituye un esfuerzo integral para garantizar que la próxima revolución tecnológica se desarrolle “en Europa, por Europa y para Europa”. Como concluye el propio documento: “Este no es el destino final, sino un plano en movimiento para el futuro cuántico de Europa”.