Queriendo dar respuesta a uno de los grandes retos actuales de las organizaciones: cómo identificar y actuar frente a riesgos de conducta, incumplimientos normativos y amenazas internas que se generan en canales de comunicación cada vez más diversos y masivos, Proofpoint ha presentado una solución de inteligencia artificial agéntica aplicada a la gobernanza de comunicaciones digitales (DCG).
IA agéntica para entender intención y contexto, más allá de palabras clave
Explican desde la compañía que el lanzamiento marca un cambio de enfoque. Si bien hasta ahora, la supervisión de comunicaciones se basaba en capturar mensajes y revisarlos posteriormente. Con la propuesta de Proofpoint, este modelo evoluciona hacia un control en tiempo real, en el que agentes de IA autónomos razonan sobre conversaciones y comportamientos para anticiparse a posibles problemas legales, de seguridad o de cumplimiento.
Un estudio realizado entre 1.600 responsables de ciberseguridad a nivel global revela que más de un tercio identifica a las plataformas de colaboración, como Slack, Teams o Zoom, como la principal fuente de riesgo. Estos entornos superan incluso a los chatbots de IA generativa, el almacenamiento en la nube o Microsoft 365 como foco de preocupación.
En este escenario, Proofpoint considera que limitarse a almacenar mensajes o aplicar filtros de palabras clave resulta insuficiente. Las empresas necesitan una inteligencia que entienda el contexto y la intención de las comunicaciones, y que proporcione visibilidad y capacidad de actuación de manera inmediata.
La propuesta de Proofpoint: HCI y tecnología Nuclei
La nueva cartera de DCG de Proofpoint se apoya en la tecnología Nuclei, adquirida por la compañía a principios de año. A través de su Human Communications Intelligence (HCI), los agentes de IA analizan más de 80 canales distintos, incluyendo correo electrónico, aplicaciones de mensajería, chatbots de IA, redes sociales y voz.
La compañía asegura que esta capacidad no solo interpreta lo que se dice, sino que contextualiza y explica el porqué de cada alerta, aportando un nivel de transparencia muy superior al de las soluciones tradicionales.
Tres pilares clave
La propuesta de Proofpoint se articula en tres pilares. El primero es la inteligencia en tiempo real: con Proofpoint Capture, la compañía recopila información procedente de múltiples canales y aplica razonamiento autónomo capaz de identificar conductas indebidas, un uso inapropiado de la IA, infracciones normativas o incluso señales que apuntan a una cultura laboral tóxica.
El segundo pilar es la supervisión explicable y escalable. A través de Proofpoint Supervision, la solución emplea IA diseñada para interpretar el tono, la intención, los emojis, la taquigrafía o fragmentos de código en distintos idiomas. Este enfoque permite reducir hasta un 90% el “ruido” generado por falsos positivos y facilita una revisión manual mucho más eficiente.
Por último, se encuentra la prevención de riesgos integrada. En este caso, las señales generadas por la inteligencia de comunicaciones humanas (HCI) se conectan con Insider Threat Management, lo que posibilita correlacionar comunicaciones con la actividad de los usuarios en los endpoints y proporcionar así a los equipos de seguridad y cumplimiento una visión completa de los riesgos.
Los primeros agentes de inteligencia de comunicaciones humanas ya están disponibles. Proofpoint tiene previsto añadir nuevas capacidades basadas en IA en el cuarto trimestre de 2025 e integrar la solución con Insider Threat Management en el primer trimestre de 2026.