A finales de enero se filtró, a través de Calcalist, que Armis tenía interés en adquirir la startup israelí-estadounidense Silk Security, centrada en ayudar a las organizaciones a priorizar sus esfuerzos de respuesta frente al riesgo de ciberseguridad. La compra, que se confirmaba esta semana, es la segunda de Armis tras la de CTCI (Cyber Threat Cognitive Intelligence), anunciada el pasado mes de febrero.
La tecnología de Silk Security, por la que Armis ha pagado 150 millones de dólares, se integrará en Centrix, que es la plataforma de gestión de vulnerabilidades del proveedor. “Con la adquisición de Silk Security, Armis Centrix ahora abarcará todas las fuentes de datos, desde dispositivos locales hasta código, nube y herramientas de seguridad de aplicaciones. Esto proporcionará a los equipos de seguridad y desarrolladores una visión consolidada de cualquier hallazgo de seguridad y les permitirá gestionar el proceso de corrección de forma eficaz”, ha explicado la compañía en un comunicado.
Fundada en 2022, Silk Security había recaudado 12,5 millones de dólares en financiación hasta la fecha de inversores como Insight Partners y Falcon Fund de CrowdStrike, según datos de Crunchbase.
La compra de Silk Security completa la estrategia de Armis de construir una plataforma integral que pueda ver, proteger y administrar todos los activos y dispositivos en cualquier lugar de la huella digital de la organización.