El dato se ha convertido en el nuevo perímetro y el mercado está reaccionando en consecuencia. Cyera, especializada en seguridad del dato y fundada en 2021, apunta a una valoración de 9.000 millones de dólares tras una nueva inyección de capital. Un movimiento que refleja cómo la irrupción de la IA está acelerando el valor estratégico de este tipo de plataformas centradas en proteger información crítica.
Desde su nacimiento, Cyera ha encadenado rondas de financiación a un ritmo poco habitual incluso en ciberseguridad. Tras una ronda inicial y una Serie A en sus primeros meses, la empresa levantó 100 millones de dólares en una Serie B en 2023, consolidando su posición en el segmento de data security posture management. El punto de aceleración llegó en 2024, con dos grandes rondas que llevaron su valoración a unos 3.000 millones de dólares y la colocaron en el radar de los grandes fondos internacionales.
En junio de 2025, una nueva ronda de 540 millones elevó la valoración hasta los 6.000 millones, duplicando de nuevo la cifra en apenas unos meses. Ahora, el desembarco de Blackstone con una inversión de unos 400 millones situaría a Cyera en el entorno de los 9.000 millones de valoración y más de 1.700 millones de dólares de financiación acumulada.
Este crecimiento encaja con lo que está ocurriendo en el mercado: la seguridad del dato se ha consolidado como uno de los ejes estratégicos de la ciberseguridad en plena era de la IA. La adopción acelerada de modelos y agentes inteligentes obliga a las organizaciones a replantearse cómo localizan, gobiernan y protegen su información, especialmente en entornos cloud, SaaS y arquitecturas híbridas. En ese contexto, las plataformas capaces de ofrecer visibilidad, control y reducción de riesgos sobre datos dispersos se han situado en el centro del interés tanto de clientes como de inversores.
Cyera frente a los actores tradicionales
La comparación con otras compañías del segmento ayuda a dimensionar el momento que vive Cyera. Varonis, uno de los nombres históricos en seguridad del dato, ronda actualmente una valoración cercana a los 3.800 millones de dólares, apoyada en ingresos de alrededor de 550 millones anuales, aunque con signos de desaceleración en parte de su negocio más tradicional. Cyera se mueve todavía en cifras de ingresos mucho más contenidas —en torno a los 100 millones de ARR según estimaciones del mercado—, aunque capitaliza una narrativa de crecimiento ligada a la nube, la automatización y la protección del dato en escenarios impulsados por la IA.
El contraste se acentúa al observar el mapa competitivo. Buena parte de las startups especializadas en data security posture management (DSPM) han acabado integradas en grandes plataformas tras ser adquiridas por proveedores como Palo Alto Networks (Dig Security en 2023), IBM (Polar Security en 2023), CrowdStrike (Bionic en 2023), Proofpoint (Normalyze en 2024), o Rubrik (Laminar en 2023), lo que ha reducido el número de actores independientes de cierto tamaño y ha dejado a Cyera como de los pocos actores independientes con tamaño suficiente para aspirar a convertirse en una plataforma de referencia, una posición que ayuda a explicar el fuerte apetito inversor.
La adquisición, por parte de Cyera, de Trail Security en 2024, orientada a reforzar su propuesta en prevención de fuga de datos (DLP), apunta además a una estrategia clara: ampliar perímetro funcional y competir de tú a tú con proveedores consolidados que históricamente dominaban este terreno. Al mismo tiempo, la convergencia entre seguridad del dato y seguridad de la IA empieza a dibujar un nuevo campo de batalla en el que Cyera quiere jugar un papel protagonista, anticipándose a una nueva generación de startups centradas en la protección de modelos, pipelines y flujos de datos asociados a la IA.
La operación confirma una tendencia clara: en la carrera por asegurar el dato en la era de la IA, el mercado ya ha empezado a señalar a sus principales apuestas.
















