Tras recibir el visto bueno por parte de las autoridades chinas, Broadcom está listo para cerrar la adquisición de VMware esta semana, justo antes de la fecha de vencimiento oficial del acuerdo.
Broadcom anunció inicialmente su plan para comprar VMware por 69.000 millones de dólares (61.000 millones en efectivo y 8.000 millones de deuda). Originalmente se planteó completar la transacción el 26 de febrero de este año para después extender la fecha límite hasta el 26 de noviembre. Los términos de la adquisición especifican que Broadcom debería pagar a VMware 1.500 millones de dólares en caso de que el acuerdo no se llevara a cabo.
La compra, la más importante de Broadcom, es el último esfuerzo del director ejecutivo Hock Tan para impulsar el negocio de software del fabricante de chips.
Broadcom espera que la adquisición de VMware le proporcione una plataforma para ampliar su negocio de software empresarial. VMware cuenta con una sólida cartera de productos y servicios que ayudan a las empresas a modernizar su infraestructura de TI. La combinación de estas ofertas con los productos y servicios de Broadcom permitirá a la empresa ofrecer soluciones más completas a sus clientes.
La adquisición de VMware ha sido recibida con una mezcla de reacciones. Algunos analistas han elogiado la adquisición, argumentando que es una buena combinación estratégica para ambas empresas. Otros analistas han expresado su preocupación por el poder de mercado que Broadcom podría obtener con la adquisición.