El 54 % de los trabajadores reconsiderarían trabajar para una empresa que recientemente hubiera experimentado una brecha de seguridad. Así lo dice un estudio de Encore que busca descubrir la brecha que existe entre las juntas y los equipos de seguridad cuando se trata de abordar las demandas de ciberseguridadUn 33% del personal asegura que estaría «completamente desfasado» si su empleador sufriera un ciberataque.
Y eso cuando el 57% de los C-Leves reconocen que su emprera ha tenido una brecha de seguridad en los últimos doce meses. En todo caso, la mayoría de los trabajadores de oficina no lo sabían, y solo el 39% creía que su organización había sido víctima de una brecha exitosa.
El 41% de los ejecutivos C-Level encuestados mencionaron el daño a la reputación como uno de los mayores costes para su negocio después de un ciberataque, y el 34% estuvo de acuerdo en que la pérdida de la clientela o de su confianza fue un coste significativo.
El informe también recoge que la comunicación del ciberriesgo a los ejecutivos de alto nivel está mejorando claramente, y es que solo un 4% de los ejecutivos dijeron que no discutieron la ciberseguridad en la sala de juntas. Por otra parte, solo la mitad de estos ejecutivos dijeron que la ciberseguridad era una prioridad principal, y más del 60% de los líderes de seguridad informaron que no se sentían respaldados por la junta cuando se trataba de mitigar el ciberriesgo.