Para Miguel Ángel Rojo, CEO de Botech, el principal valor que aporta su compañía a las entidades financieras es su capacidad para acompañarlas de manera integral en un contexto donde el cumplimiento normativo, la detección de fraude y la anticipación a amenazas tecnológicas son cada vez más exigentes. “Nuestra propuesta de valor se basa en ir de la mano del cliente, no solo vendiendo tecnología, sino entendiendo su negocio y ayudándole a cumplir los objetivos que marca la regulación, pero también a que eso funcione operativamente”, afirma.
Entre las tendencias que marcarán la agenda del sector en los próximos meses, Rojo destaca la necesidad de traducir el cumplimiento regulatorio en prácticas reales. “La clave ya no es tener papeles, sino demostrar que el cumplimiento se ejecuta en la operativa”, señala. En ese sentido, considera que tanto la normativa DORA como NIS2 obligarán a las organizaciones a repensar su modelo de resiliencia tecnológica y a integrar soluciones de ciberseguridad más allá del checklist documental.
Frente a otras propuestas del mercado, Botech se diferencia por su enfoque de acompañamiento especializado. “Nosotros no competimos con la gran consultora que te da una solución estándar. Nos sentamos con el cliente, entendemos qué necesita, lo analizamos y le decimos lo que sí y lo que no va a funcionar”, explica. Además, pone en valor la trayectoria de la compañía tanto en Europa como en Latinoamérica, donde también trabajan con entidades que, aunque están en etapas distintas de madurez digital, comparten los mismos desafíos en términos de seguridad, fraude y cumplimiento.