Tras la compra, que valora la acción de ZeroFox en 1,14 dólaras, un 45% más de su valor en bolsa, la compañía dejará de cotizar en el Nasdaq y se convertirá en empresa privada. El anuncio se realizaba el pasado 6 de febrero, un mes después de presentar los resultados correspondientes a su tercer trimestre.
Al anuncio de la venta a Haveli Investments, destacaba James C. Foster, fundador, CEO y presidente de la compañía, que esta transacción “posiciona mejor a ZeroFox para nuestra próxima fase de crecimiento”.
Ian Loring, director general senior y presidente ejecutivo de Haveli Investments Software Fund, destacaba que “las soluciones innovadoras de ZeroFox permiten a las organizaciones identificar, gestionar y remediar de forma proactiva las amenazas digitales externas a escala. Con una base de clientes grande y en expansión y un crecimiento constante, ZeroFox está bien posicionado en una categoría importante y en expansión”.
Durante la presentación de resultados destacaba James Foster que los clientes empresariales confían en la plataforma ZeroFox, One Platform, “para resolver sus desafíos externos de ciberseguridad”, y que se mantiene la demanda de en los cuatro pilares estratégicos de la plataforma: protección, inteligencia, disrupción y respuesta.
Explicaba el directivo que los días en los que las amenazas internas eran una de las principales preocupaciones de los CISO han quedado atrás y que ahora los responsable de ciberseguridad deben protegerse “de una gran cantidad de amenazas externas que están más allá de sus perímetros y, con mayor frecuencia, más allá de sus fronteras”.
Durante la presentación de resultados apostaba James Foster por lo que definía como la Triple Corona de seguridad moderna que llevará a las empresas a estandarizarse en tres tipos de plataformas, las internas, “como Microsoft, CrowdStrike o SentinelOne”, otras plataformas perimetrales, “como Palo Alto Networks o Zscaler”, y “una plataforma externa como ZeroFox”. Asegurando que “los clientes se han cansado de la complejidad y el coste de administrar múltiples productos externos de ciberseguridad para protección de riesgos digitales, inteligencia de amenazas, e incluso gestión de servicios de ataques externos”, aseguraba el directivo que “nuestra capacidad comprobada para proporcionar una plataforma de ciberseguridad externa que unifique protección, inteligencia, disrupción del adversario y respuesta es un componente crítico del éxito de esta organización y nos brinda ventajas competitivas clave”.