Trabajar desde diferentes dispositivos y ubicaciones es uno de los principales riesgos a los que deben hacer frente las empresas durante el verano. Según datos de Gartner, en 2023 se espera que el 39 % de los empleados a nivel global trabaje de forma híbrida. Un dato que hace que, en España, según se recoge en un informe de Palo Alto Networks, cuatro de cada diez empresas consideran fundamental proteger los dispositivos del IoT en entornos de trabajo operativos e híbridos.
A esto hay que sumarlo los empleados que están de vacaciones y la incorporación de personal temporal para cubrir dichas vacaciones. Todo ello convierte la temporada estival en un periodo deseado para los malhechores digitales. Por ello, desde Palo Alto han señalado los principales aspectos a los que las empresas deben prestar especial atención.
Los expertos de la compañía apuntan, además de los dispositivos IoT, a los problemas que pueden derivarse de la llegada de las redes y servicios 5G. Riesgos de seguridad del 5G y 4G que únicamente el 52 % de las empresas españolas entiende. A este desconocimiento al que hay que añadirle la falta de información sobre las soluciones disponibles para trabajo de forma completa.
La compañía también advierte de la necesidad de cumplir las políticas corporativas sobre el uso correcto de datos y dispositivos, así como la obligatoriedad de educar a los empleados sobre las mejores prácticas de ciberseguridad.
Pero, ¿qué otras precauciones pueden tomar las empresas para evitar ser atacadas? Los expertos de la compañía recuerdan la importancia de disponer de controles de seguridad físicos, así como evitar las redes inseguras. En este punto los empleados deben optar por utilizar una VPN segura o servicios wifi seguros.
Además, es fundamental que se realicen mayores controles de acceso y evitar robos o pérdidas de los dispositivos. Por último, tal y como apuntan desde Palo Alto Networks, implementar tecnología de inteligencia artificial permite a las empresas prevenir ciberataques y es que las soluciones de IA, a través de algoritmos, son capaces de detectar cada día 1,5 millones de nuevos ataques en todo el mundo.