Formación de los empleados en seguridad y la contratación de un seguro de responsabilidad cibernética son elementos clave en una estrategia de ciberseguridad. Al menos es lo que aseguran desde Hornetsecurity, que defiende que ambos elementos contribuyen a reducir el impacto de posibles ataques, mantener la estabilidad financiera y garantizar la continuidad del negocio.
Explican desde la compañía de que la concienciación en ciberseguridad por parte de los empleados ya no es una recomendación opcional. Con el incremento y sofisticación de las amenazas, las aseguradoras están endureciendo sus condiciones y, en muchos casos, exigen programas de formación como requisito para ofrecer una cobertura completa.
El papel del ciberseguro
Cada vez son más las organizaciones que contratan seguros de responsabilidad cibernética para disponer de respaldo financiero y legal ante incidentes como ataques de ransomware, interrupciones en la red, extorsión o pérdida de datos.
Contar con un ciberseguro ofrece múltiples ventajas para las organizaciones, como la cobertura financiera de los costes asociados a la investigación y recuperación tras un ataque, asistencia legal frente a posibles sanciones o incumplimientos normativos, apoyo económico para garantizar la continuidad del negocio y compensar las pérdidas derivadas de una interrupción, acceso a expertos en tecnología, comunicación de crisis y protección de datos, así como protección específica frente a la pérdida o el acceso no autorizado a información sensible..
Formación como primera línea de defensa
Dado que más del 90% de los ciberataques implican algún tipo de ingeniería social o phishing, el factor humano sigue siendo un punto crítico en la seguridad de las organizaciones. Por ello, contar con personal bien formado es esencial.
Hornetsecurity ofrece su servicio de Security Awareness, que busca fortalecer esa primera línea de defensa, reducir los riesgos operativos y minimizar la necesidad de activar las coberturas del seguro.