Según el 2022 State of Ransomware Report de Delinea, el 25% de las organizaciones fueron víctimas de ataques de ransomware en los últimos 12 meses. La cifra supone un descenso del 61% con respecto a 2021, año en el que el 64% de las organizaciones declararon haber sido víctimas de ransomware. Del mismo modo, el número de empresas que pagaron el rescate también ha descendido, pasando del 82% al 68%, lo que podría ser una señal de que se están teniendo en cuenta las advertencias de expertos y organismos de no pagar rescates.
Por otro lado, se confirma que las empresas más grandes tienen más probabilidades de ser víctimas de ransomware, ya que el 56% de las organizaciones con 100 o más empleados afirman haber sido víctimas de ataques de ransomware.
Se teme que los resultados lleven a las empresas a bajar la guardia, porque el estudio también recoge que la asignación presupuestaria para combatir el ransomware ha disminuido y actualmente el 68% de los encuestados afirman haber asignado presupuesto a la protección contra el ransomware, frente al 93% del año pasado. Lo mismo sucede con el número de empresas que cuentan con planes de respuesta a incidentes, que se ha reducido del 94% al 71%.
Además, sólo la mitad de las empresas dice estar tomando medidas proactivas y probadas para prevenir este tipo de ataques, como la aplicación de mejores prácticas de contraseñas (51%) y el uso de la autenticación multifactor (50%).
En opinión de Art Gilliland, CEO de Delinea, «la reducción de los ataques de ransomware es una señal alentadora, pero las organizaciones necesitan permanecer en guardia contra esta amenaza, constante y en evolución”.
Por útimo, el estudio revela que las consecuencias de los ataques de Ransomware ahora son más tangibles, ya que los encuestados manifiestan que sus empresas han perdido un 56% de ingresos y un 50% de clientes con respecto al año anterior.